Si crees que los sábados y domingos es cuando más llueve, estás en lo cierto: la previsión meteorológica de Nueva York indica que hemos visto llover durante seis de los últimos 10 fines de semana, y éste no va a ser una excepción.
Aunque estamos a mitad de junio, el verdadero clima veraniego aún no ha hecho acto de presencia, y definitivamente estamos experimentando condiciones más frías y sombrías de lo que esperábamos. (Las posibilidades de días de playa no han sido muy buenas).
Si vas a salir este fin de semana, te contamos qué tiempo hará y te ayudamos a planificarte.
El tiempo en Nueva York: otro fin de semana lluvioso
Según la previsión de 10 días de The Weather Channel, el sábado 14 de junio abundarán los cielos grises y los chubascos, con un 90% de probabilidades de lluvia y temperaturas en torno a los 60 grados. Podemos esperar lluvia por la mañana y algunos chubascos por la tarde, con un 85% de humedad. (Es hora de echar mano de los sombreros porque, desde luego, no será un día para peinarse).
El domingo 15 de junio tendremos una tregua. El cielo estará nublado, con un 79% de humedad, pero no lloverá. Si tiene pensado hacer algo al aire libre, el domingo es sin duda el mejor de los dos días. Pero atención: necesitará una chaqueta, porque no es probable que las temperaturas lleguen a los 60 grados.
Aunque aún faltan varios días para el solsticio de verano, tememos un poco que se cumplan las predicciones meteorológicas para el verano de 2025. Según The Old Farmer’s Almanac, al noreste le espera una estación más calurosa y lluviosa de lo habitual. (No mola, Madre Naturaleza. No mola).
Para hacer las cosas aún más atractivas, hay una estadística divertida: el estado de Nueva York va a recibir precipitaciones por encima de la media entre mayo y agosto, las franjas horarias más veraniegas, y en Nueva York es probable que sean entre un 40 y un 50% superiores a lo habitual. Si aún no te has hecho con un paraguas, es el momento de actuar.
Le mantendremos informado de las novedades meteorológicas de la ciudad. Cruza los dedos para que la mayoría de las precipitaciones se produzcan durante la semana laboral.