Los neoyorquinos siempre han tenido una relación de amor-odio con la MTA. Desde lidiar con las interminables ratas del metro hasta el misterioso líquido que gotea del techo -ninguno de los dos tiene que ver con el propósito real del metro de llevarte del punto A al punto B a tiempo, ¡pero esa es otra historia! Y aunque puede que tengas tus apuestas sobre qué línea de metro ha sido la menos fiable este año, las métricas indican que el tren B fue la línea de metro menos fiable de 2024.
Según datos de la MTA, analizados por el New York Postel 82,1% de los trenes de metro de todo el sistema circularon a tiempo este año (tenemos que admitir que es más de lo que esperábamos). Sin embargo, la línea B sólo llegó a tiempo el 65,1% del año. Otros trenes en los que no siempre se pudo confiar fueron el C (68,8%), el F (70,1%) y el 2 (70,5%).
Por el contrario, la línea S 42 fue la más puntual, con una fiabilidad cercana al 100% (99,4%). No muy lejos se situaron la lanzadera S Franklin, con un 99,3% de puntualidad, y la lanzadera S Rockaways, con un 95,7% de puntualidad. Más allá de las lanzaderas S, el tren L fue la cuarta línea más fiable en 2024 con un porcentaje de puntualidad del 91,9%. El tren 7 también se situó en los 90, con un 91,1% de puntualidad.
En contraste con los datos de este año, el tren F resultó ser el más poco fiable en 2023 después de que la MTA trabajara para modernizar el sistema de la línea de 70 años de antigüedad. La línea B fue una bolsa mixta en 2023 con un 77% de puntualidad si no se tiene en cuenta que no hay servicio de fin de semana.
Aunque el New York Post afirma que la fiabilidad general del sistema ha mejorado un 1,7% en los últimos cinco años, en realidad ha disminuido con respecto al año pasado. En 2023, la fiabilidad de todo el sistema era del 84%. Ahora es del 82,1%, un 1,9% menos.
Cuando se amplía esa lente a líneas específicas, el tren C es la línea que menos ha mejorado en un periodo de cinco años, mientras que el tren M es el que más ha mejorado en el mismo periodo de tiempo.
Nos pusimos en contacto con la MTA para obtener más información sobre los datos y nos comunicaron que la MTA sigue esforzándose por mejorar la fiabilidad, en concreto mediante la instalación de CBTC (control de trenes basado en comunicaciones), que en realidad no es más que una modernización de las señales. Tanto la línea 7 como la L tienen CBTC instalado, lo que demuestra la valía del sistema, ya que ambas líneas figuran entre las más fiables de este año.
«New York City Transit sigue ofreciendo los mejores resultados de puntualidad en más de una década, a la vez que circulan 1.200 trenes más a la semana con mejoras en 12 líneas y más del doble de viajeros. Los neoyorquinos saben que el metro es la forma más rápida y fiable de desplazarse», nos dijo Meghan Keegan, portavoz de la MTA.
Así que , con 2025 por delante, sólo podemos esperar trenes más fiables 🤞.